Patricio García Ramos: "Pensamientos (VIII)"
El amanecer de cada día supone un reto y una nueva ocasión, que se nos ofrece, para originar la aventura de escribir páginas en la historia de nuestra vida. Por ello, considero importante empezar bien cada amanecer y, al igual que la luz del sol comienza a romper la oscuridad de la noche, inicio mi historia diaria con la oración ofrenda-reflexión en deseo de que, Dios, sea la luz que guie mi camino y fortalezca mi espíritu en los valores que haga de mi acontecer un continuo agradecimiento a los dones que se ponen en mis manos. Nuestros anhelos deben estar marcados por la ilusión puesta en vencer las dificultades que van jalonando nuestro camino y que en gran medida, son el producto de nuestras limitaciones. Principalmente en nuestras relaciones vitales: familiares, laborales y de amistad. En estas relaciones, llevados por el ambiente que nos produce “bajadas de tensión” en nuestro ánimo, tendemos a ser “cenizos”. En esos momentos fortalezcámonos en ver “la botella medio llena” y qu