viernes, 22 de febrero de 2013

Para que vayan aprendiendo a ahorrar

El dinero no cae del cielo, su consecución implica esfuerzo, trabajo, y ello lo tienen que saber y experimentar nuestros hijos, para que lo valoren. Es importante que desde pequeños se les enseñe a ahorrar, en lugar de dejarles que gasten el dinero en caprichos. Los padres deben hacerles reflexionar sobre el porqué de sus gastos, y procurar que conozcan las necesidades de los demás. Se trata que sean sobrios en sus gastos, no despilfarradores del dinero que a otros les puede ser imprescindible porque carecen de lo necesario. Puede ser interesante que algunas cosas en las que están empeñados en comprar, por ejemplo una prenda de marca, la paguen en parte con su dinero: les ayudará también a que cuiden sus pertenencias.

Pero no sólo deben de ahorrar para ellos, también han de hacerlo para los demás: hermanos, padres, amigos, ayudas sociales... Es una manera de hacer de nuestros hijos, seres humanos más solidarios al invitarlos a compartir con los demás. Desde comprar un pequeño regalo para un hermano o miembro de la familia, hasta prestar de manera desprendida.

Estas son algunas sugerencias para que los hijos comprendan el valor y adecuado uso del dinero:

No darles demasiadas cosas para suplir la escasez de tiempo que dedican a sus hijos y que se acostumbren a agradecer las que reciben. Un peligro que se da en nuestra sociedad es que suplamos la falta de tiempo que dedicamos a nuestros hijos comprándoles muchas cosas para ganarnos su afecto. La necesaria dedicación de tiempo a los hijos no se suple con cachivaches.

Cuidar lo que tienen, cuidarlo para que dure y que esté en condiciones correctas. Que conozcan el precio de la ropa y juguetes que se les compra, acostumbrándoles a elegir lo que conviene y no lo más caro.

Ayudarles a vivir la autodisciplina diaria. La capacidad de autocontrol nos permite ser dueños de nosotros mismos y de las cosas que tenemos, pero para conseguirlo nos hemos de entrenar en las cosas más normales y corrientes que hacemos a lo largo del día: ser puntual al levantarnos, al empezar a estudiar, tener ordenada nuestra habitación, etc.

No permitirles que entren en una constante comparación con los demás: marcas de ropa, material deportivo… La sociedad de consumo nos vende no sólo lo último del mercado sino la mejor marca. Es frecuente observar la dependencia que tienen los adolescentes de las marcas, hay que enseñarles que la persona no vale por la marca de lo que lleva puesto, sino por lo que es y hace con los demás.

Evitar los caprichos en las comidas y bebidas: comer lo previsto para todos, no fuera de hora, en las cantidades que son, sin elegir lo mejor para ellos; y cuidar los modales en la mesa.

No ahorrarles sacrificios razonables: que aprendan a colaborar en pequeños encargos de la casa.

Ayudarles a revisar sus pertenencias para ver si hay juguetes u objetos que no necesita ni utiliza: pueden servir para otros hermanos o personas necesitadas.

jueves, 14 de febrero de 2013

Ocho juegos para estimular el habla del bebé

Aprender a hablar es un proceso instintivo y natural, pero los adultos pueden ayudar. Estimular al niño desde que emite sus primeros balbuceos hasta que es capaz de pronunciar las primeras frases es fundamental para el desarrollo lingüístico del pequeño, según algunos especialistas. Este artículo propone ocho juegos que ayudan al bebé a aprender a hablar y ofrece consejos para ayudarle en este camino.

Del balbuceo a las palabras. Este es el primer camino por el lenguaje que recorre el bebé. Comienza cuando emite sus primeros fonemas, alrededor de los siete o nueve meses. Cuando cumple los 12 o 15 meses, ya suele ser capaz de denominar algo por su nombre. A partir de entonces, y hasta que alcanza los cinco años, el pequeño desarrolla su capacidad lingüística. Amplía poco a poco su vocabulario y aprende a construir frases completas. El niño aprende a hablar.

Este aprendizaje se produce de forma natural, pero adaptado al ritmo y características de cada menor. Sin embargo, sí hay juegos y actividades con las que se puede apoyar el habla del bebé. "La actitud de los padres no debe ser pasiva", defiende el destacado psicólogo estadounidense B.F. Skinner, que sostiene que el medio que rodea al niño tiene un papel muy relevante en su desarrollo del habla. "Desde las primeras edades, el entrenamiento auditivo es la base para el correcto desarrollo de la comunicación oral", apunta, por su parte, Margarita Gil, directora de un gabinete de aprendizaje y lenguaje.

A continuación se explican algunos juegos para apoyar a los pequeños en su aprendizaje del habla que recomienda esta especialista.

Cinco juegos de sonidos para aprender a hablar
Los juegos son divertidos para el niño, pero, además, le pueden ayudar a aprender a hablar.

1. El traductor de sonidos
Un buen ejercicio para que el pequeño aprenda a discriminar los sonidos y los relacione con el lenguaje es hacer de traductor de sonidos. Para ello, el adulto debe traducir con la palabra correspondiente los sonidos y ruidos cotidianos que se producen de forma habitual, como el timbre de la puerta, la lavadora o el teléfono. También se pueden utilizar los de la calle: una sirena, pitidos, un perro o coches. Y los de la naturaleza: un pájaro, el viento, la lluvia, etc.

2. ¿Dónde estoy?
Con este juego se puede enseñar a los más pequeños a localizar el origen del sonido. El adulto se puede ocultar en distintas partes de la casa y emitir un sonido desde su escondite. También se puede hacer esta actividad con la ayuda de un juguete sonoro.

3. ¡Saca la lengua!
Una buena idea para trabajar la motricidad labiolingual es decirle al pequeño que su cara es una casita, en la que los ojos son ventanas, la nariz el timbre, la boca la puerta y la lengua un amigo que está dentro de ella.
Este juego permite entrenar los movimientos. Para ello, hay que pedir al niño que llame al timbre, abra la puerta y que deje salir (y volver a entrar después) a su amigo para dar un paseo.

4. Vamos a soplar
Para aprender a articular bien las palabras, el niño debe ejercitar la respiración y también aprender a acompasar el ritmo de la misma. Un buen ejercicio para ello es jugar a hinchar globos.

Otra propuesta es colocar pequeñas bolitas de papel o de algodón sobre una superficie lisa y soplar sobre ellas para lograr que lleguen las primeras a la meta.

5. La orquesta
Este juego permite relacionar el lenguaje gestual con el oral a través de los sonidos. En este caso, será la música la que estimule el habla del niño.

El adulto enseña al pequeño los diferentes sonidos de los instrumentos musicales a la vez que realiza el gesto que le corresponde (simula que los toca). Así, el tambor será pon, pon, pon, la trompeta pa, pa, pa y la guitarra ran, ran, ran. El pequeño debe identificar cada gesto y responder con la onomatopeya correspondiente.

Tres juegos para ampliar y reforzar el vocabulario del niño
Cuando el pequeño ya ha aprendido a expresar sus primeras palabras, se puede estimular y reforzar su vocabulario. Para ello existen otros juegos útiles, que le permiten, además, entender el significado.

Estas son algunas propuestas:

1. ¿Qué hay ahí?
Un cuento con ilustraciones para niños, una lámina o una revista servirán para ayudar al pequeño a ampliar el vocabulario. El juego consiste en contemplar juntos las imágenes y pedirle que señale y enuncie lo que ve en ellas. Cuando no sepa el nombre de alguna de las cosas que observa, el adulto debe decirle qué es y hacerle una breve descripción.

2. El tren de las palabras
"Llevo un vagón de... (fruta, animales, colores, etc)". A partir de esta frase el niño y el adulto empiezan a llenar el tren con palabras de la familia elegida. El adulto puede incorporar las menos usuales para que el pequeño pueda participar de forma activa en el juego, a la vez que aprende nuevas palabras.

3. Veo, veo
Este clásico juego enseña al niño a describir cosas y le ayuda a desarrollar vocabulario. El menor (o el adulto) elige un objeto que esté a la vista y comienza a dar pistas, entre ellas, su color, la letra por la que empieza o su situación. El turno termina cuando el otro jugador adivina qué es.

Consejos para no frenar el habla del niño
• Dejarle hablar. No interrumpir al niño cuando quiere expresarse para corregirle, ni terminar las frases por él para acelerar la conversación.

• Aprovechar cualquier ocasión para introducir más vocabulario, explicarle las palabras nuevas y su significado.

• Leer con el pequeño cada día y dejarle participar de forma activa en la lectura. Hay que responder a sus preguntas sobre ella.

• No corregirle cuando articule mal una palabra. Es mejor introducir el término de forma correcta de nuevo en la conversación.

• Los padres son el principal modelo lingüístico para el niño. Por eso hay que cuidar el propio vocabulario y evitar utilizar un lenguaje infantilizado con el pequeño.

miércoles, 13 de febrero de 2013

¡Comenzamos!


Mi hijo se aburre. ¿Para qué sirve el aburrimiento?

Niña aburrida tumbada en el suelo. Pensativa¿El aburrimiento sirve para algo?¿Para qué sirve el aburrimiento?

Ya hemos hablado en más de una ocasión sobre la importancia del juego en la infancia. El juego es la base de todos los aprendizajes que nuestros hijos realizan durante sus primeros años de vida. 

Pero ¿qué pasa cuando se aburren? ¿Es necesario que los niños conozcan el aburrimiento? Somos muchos los que creemos que si.

Primero y antes de hablar del aburrimiento, hagamos un repaso sobre todo lo que el juego proporciona a nuestros hijos.

Mediante el juego el niño se desarrolla física, psíquica, afectiva y socialmente.
Mediante el juego el niño aprende a conocerse mejor a sí mismo y al mundo que le rodea.
Es mediante el juego que el niño se socializa y se integra en el grupo poniendo en práctica sus habilidades sociales.
Jugando "a ser" o "disfrazándose de", es decir, mediante el juego simbólico nuestro hijos cultivan su imaginación y creatividad, su capacidad empática se ve beneficiada y desarrollan sus habilidades lingüísticas.
El juego fomenta la autoestima y el autocontrol, el aprendizaje de las normas sociales, el trabajo en equipo y la cooperación.
El juego proporciona confianza en uno mismo.
Estimula la curiosidad, motor de cualquier aprendizaje.
El juego les facilita la expresión de sentimientos. Al jugar los niños exteriorizan sus miedos, sus angustias y preocupaciones. El juego les permite elaborar sus sentimientos. Mediante el juego simbólico, cuando juegan con sus muñecos, animales, monstruos, … ponen en marcha sus emociones ensayando una y otra vez nuevos finales para sus historias, situaciones difíciles poniéndose en el lugar de otro.
...Como podemos intuir tras leer algunos de los beneficios del juego para el desarrollo de nuestros hijos, vemos que éste es un elemento educativo indiscutiblemente útil y provechoso que no debemos pasar nunca por alto.
 
Pero, ¿por qué es necesario que los niños se aburran?
Un niño que tiene toda la agenda ocupada con el cole, las extraescolares, los deberes, el partido del sábado ... no tiene tiempo para aburrirse, pero tampoco para jugar, para crear nuevos juegos, desmontar, crear, ... Algo tan importante para el desarrollo de la creatividad, hoy en día un valor en alza.

Para poder ser creativo, para poder imaginar cosas nuevas, hay que tener tiempo, quizás aburrirse un poco para sacar de la nada algo divertido y nuevo, plantearse ¿y ahora qué hago? ...


Un niño que juega todo el día con juguetes electrónicos acaba aburriéndose porqué necesita imaginar y no solo hacer aquello que previamente se ha diseñado.

Coincido plenamente con el artículo que ha motivado esta entrada publicado por FAROS . Y al igual que ellos, creo en la necesidad de que los niños se aburran, de que tengan ese pequeño espacio para decir ... "Mami, me aburro ¿qué hago? ¿qué puedo hacer? ¿a qué jugamos?"

Esta situación es la situación ideal para que nuestros hijos aprendan a gestionar estos espacios vacíos, que en definitiva son los ideales para fomentar la imaginación y la creatividad.

Como padres, ante esta situación, podemos sugerirles, orientarles pero evitemos decirles exactamente lo que deben hacer porqué así les privaríamos de esos recursos tan importantes que son la creatividad y la espontaneidad.

Los niños que dan rienda suelta a su imaginación con total libertad, serán niños que en un futuro tendrán mayor autoestima, más seguridad en sí mismos y serán más sensibles e imaginativos. Dejemos que:

inventen juegos nuevos, con reglas diferentes a las habituales.
Jueguen al aire libre, llevémosles al parque para que se relacionen con otros niños, o hagamos una excursión por la montaña o la playa.
Rompe la cotidianidad.

Imagina y cuéntales historias, cuentos o canciones ...

lunes, 11 de febrero de 2013

¿Cómo elaborar y superar el duelo?

dueloDicen que el tiempo es el que cura las heridas pero a veces el tiempo puede escaparse de las manos y pasar de un duelo normal a un duelo patológico. Entonces, ¿Qué es lo que puedes hacer para elaborar y superar el duelo en el menor tiempo posible y de la forma más sana?

Tal y como os planteábamos en el artículo “¿Qué es el duelo?“, en el que hablábamos de qué supone para una persona perder a alguien a quien se ama y los diferentes tipos de duelo, en este artículo nos centraremos en cómo se puede superar porque si hay algo que tenemos que tener presente es que los atajos para el dolor no existen, hay que vivir un proceso, pero éste puede ser más o menos sano/patológico.
Cómo elaborar el duelo

Indudablemente se necesita tiempo para poder aceptar que hemos perdido a un ser querido, se necesita tiempo para extrañarle y llorarle hasta que llegue el momento en el que puedas mirar hacia tu tiempo presente y poco a poco comenzar a ser consciente, otra vez, de la vida.

Hay diferentes teorías sobre cómo puedes elaborar y superar el duelo de la forma menos patológica, la propuesta que nosotros hacemos es la que consideramos la menos nociva y la que permite que cada persona pueda ir pasando de nivel con sus tiempos personales.



Aceptar que ya no está

En múltiples ocasiones de la vida hemos podido comprobar en nuestra propia piel como cabeza y corazón no están en sintonía, lo que podemos entender con la cabeza no es pausible para el corazón y viceversa.

En el duelo se vive un mismo proceso, es verdaderamente complicado hacerse a la idea que la persona que se ha marchado no va a regresar, es alguien a quien no vamos a poder volver a ver ni ya vamos a poder compartir ningún momento.

Como veíamos en el artículo anterior, muchas veces se puede pasar por una etapa de negación en la que nos cuesta aceptar la realidad pero tenemos que trabajar para poder aceptarlo, siendo piadosos con nosotros mismos pues nos llevará tiempo pero haciendo un esfuerzo.

Algunas de las cosas que podemos hacer es hablar de la pérdida con personas cercanas y empáticas, las visitas al cementerio pueden resultar increíblemente dolorosas pero nos ayudan a confrontarnos con una realidad que nos resistimos a ver.

Llegará un momento en el que puedas aceptar que ya no está y date la oportunidad de despedirte, sean cuales sean las creencias religiosas que tengas o no tengas, dedícale unas palabras y un adiós.



Permítete sentir

En muchas ocasiones me he encontrado con personas que creen dedicar palabras de aliento y fuerza a aquellos que han perdido a sus seres queridos diciéndole “No llores”, “Tienes que ser fuerte” o palabras parecidas que realmente no están permitiendo a la persona ir hacia adelante.

Cuando perdemos a alguien a quien amamos tenemos que poder sentirnos y cada uno lo expresa de una manera diferente, pero hay que tener la oportunidad de poder expresarlo. Si necesitas llorar hazlo, digan lo que digan; permítete estar triste, sentir rabia o impotencia, es el momento de sentir y dejar que todo fluya pues si aguantas lo único que estás haciendo es retener unos sentimientos que al final, antes o después, tendrán que encontrar la salida.

Compartir con personas de tu confianza momentos como estos pueden ayudarte a sentirte menos solo y comprendido, un gran abrazo puede ser la mejor cura para tus heridas y puede estar lleno de palabras silenciosas porque a veces el mejor “lo siento” es aquel que no se pronuncia.


Aprender a vivir de nuevo

Una vez que has aceptado que ese ser querido no va a volver, llega el momento de aprender a vivir de nuevo y no hablamos de sobrevivir que podría ser hacer las tareas cotidianas de forma mecánica, si no aprender a vivir y sentir otra vez más allá del dolor y la nostalgia.

No digo que sea una tarea sencilla pues requiere de tiempo y de fuerza de voluntad, pero hay que volver a trabajar por encontrar el equilibrio personal porque a pesar de que tu mundo se haya parado, la vida no ha dejado de seguir hacia adelante y puedes parar por un tiempo, pero enseguida ésta te exige que vuelvas a desempeñar tu labor.


A veces lo que más cuesta es aprender a “caminar” solo cuando uno se ha acostumbrado a hacerlo todo en común, cuando todo parece que te recuerda a él, pero de nuevo hay que comenzar a dar pasos para la vida.


No sufrir no es olvidar. Vive

Llega un momento en el que la vida y tu mismo sentirás como el dolor no es tan fuerte, no sabrás si es porque te has acostumbrado a esa sensación o porque lo estás superando. Hay muchas personas que se sienten culpables cuando llega este momento porque ya no se sienten de la misma manera, pero debes de entender que el hecho de llevar mejor la situación e incluso, poder llegar a ser feliz con el paso del tiempo no implica que hayas olvidado a esa persona ni que la hayas querido menos.

Vivir no es un acto egoísta pues son muchas personas las que se encuentran a tu alrededor esperando a que salgas de la oscuridad y por fin, puedas volver a verlas. Hay personas que también dependen de ti por lo que no temas en avanzar, cuando llegue ese momento continúa hacia delante y vuelve a vivir.

sábado, 9 de febrero de 2013

Cuando un niño o una niña está "en guerra con el mundo"

BEB LL1 e1342080675806 ¿Porqué muerden los niños?Gritos, pataleos, caras coloradas, mordidas, berrinches, son comunes entre los dos y tres años, por ello denominé este artículo: en guerra con el mundo. En esta etapa los niños sufren repentinos cambios de humor, se muestran empecinados, negativos, difíciles de manejar. Las escenas se repiten en casa, en el supermercado, en el jardín y los padres se desesperan por controlar la situación.

En realidad esta es una conducta normal para esta etapa del desarrollo, un comportamiento que refleja el desequilibrio emocional de los pequeños, que se debaten entre su deseo de sentirse seguros y protegidos y su ansia de independencia.

En cuanto comienzan a caminar, descubren por primera vez en su vida la posibilidad de poder ir a donde quieren. Se sienten de pronto grandes, fuertes y preparados para comenzar a investigar lo que los rodea, pero se dan cuenta que “eso” que quieren hacer está prohibido, y cuando esto sucede se enfurecen y reaccionan con un arrebato de ira. En esta situación es imposible hablar con ellos, ni siquiera soportan que los toquemos. Algunos chicos incluso golpean la cabeza contra el suelo o aguantan la respiración hasta conseguir dar un susto de muerte a los padres (espasmos sollozos). Estos accesos de ira se deben a que no toleran las frustraciones ni sus propias limitaciones, y mientras ellos aprenden a aceptar lo que no les gusta y a tomar sus propias decisiones, necesitarán gran dosis de ayuda de nuestra parte:

Mayor flexibilidad: reflexionar sobre cuándo es necesario el límite, establecerlo con firmeza y mantenerlo en el tiempo. Para esto, padre y madre deben estar de acuerdo acerca de qué normas tomar y lo fundamental: no desautorizarse entre ellos.

Explicaciones necesarias: exponer siempre las razones de nuestra prohibición.
Sugerir en lugar de mandar: en la práctica resulta más efectiva. Las críticas o amenazas pueden ser contraproducentes.

Darles tiempo: es importante no interrumpirlos cuando están en plena actividad al menos que sea imprescindible. En lugar de esperar a último momento para decirle nos vamos, es mejor advertirle con tiempo suficiente.

Entonces ¿Qué hacer cuando la tormenta estalla?
Lo mejor es quedarse junto a él y no hablarle de su testarudez. Esperar a que se le pase el berrinche y después hacerle ver que el incidente ya está olvidado. Es necesario ser consecuentes y en ningún momento acceder a sus berrinches, de lo contrario sus arrebatos de ira, todavía espontáneos, pueden convertirse en un intento de chantaje, una forma eficaz de lograr lo que quieren.

Jack Nicholson y Andrea Bocelli unidos por la vida contra el aborto

Jack NicholsonWASHINGTON D.C., 08 Feb. 13 / 11:01 am (ACI/EWTN Noticias).- La madre de Jack Nicholson, famoso actor de Hollywood, lo concibió cuando era aún adolescente, y le ofrecieron repetidamente abortar, pero ella decidió tenerlo.

En declaraciones a la prensa estadounidense, Nicholson aseguró que está contra el aborto y que no podría asumir otra postura porque sería "hipócrita", ya que si su madre hubiera aceptado el aborto, "estaría muerto, no existiría".

Nacido en 1936, Nicholson creció creyendo que su abuela era su madre, y consideraba como su hermana a quien era en realidad su madre. El actor descubrió la verdad recién en 1974.

Nicholson aseguró que "soy contrario a mi distrito electoral en el tema del aborto, porque estoy positivamente en contra. No tengo derecho a cualquier otro punto de vista. Mi única emoción es gratitud, literalmente, por mi vida".

En un video difundido en YouTube, el tenor italiano Andrea Bocelli reveló la historia de su nacimiento y elogió a su madre por no abortarlo tras saber que nacería con una discapacidad.

En el video, titulado "Andrea Bocelli cuenta una ‘pequeña historia’ sobre el aborto", el tenor contó que su madre embarazada fue hospitalizada por "un simple ataque de apendicitis" pero los médicos, al terminar los tratamientos, le sugirieron abortar porque "el bebé nacería con alguna discapacidad".

"Esta valiente joven esposa decidió no abortar, y el niño nació. Esa mujer era mi madre, y yo era el niño. Tal vez estoy parcializado, pero puedo decir que la decisión fue correcta", aseguró Bocelli, que padece glaucoma congénito y perdió la vista a los 12 años, por un golpe en la cabeza jugando fútbol.

Jim Caviezel, actor católico que interpretó a Jesús en La Pasión de Cristo, aseguró al Catholic Digest, en 2009 que "no amo mi carrera tanto como para decir ‘me voy a quedar callado sobre esto’", refiriéndose al aborto.

"Estoy defendiendo a cada bebé que no ha nacido", señaló.

El músico adolescente Justin Bieber también ha manifestado su rechazo al aborto. En una entrevista a la revista Rolling Stone, Bieber aseguró que "realmente no creo en el aborto", pues "es matar a un bebé".

La madre de Justin Bieber, Pattie Malette, también se involucró recientemente en la causa pro vida al producir el cortometraje "Crescendo" contra el aborto y a favor de la vida.

Pattie tuvo una adolescencia difícil, involucrada en el mundo de las drogas y el alcohol, e intentó suicidarse a los 17 años, antes de convertirse al cristianismo.

Con su cortometraje, dijo, busca alentar a "las jóvenes mujeres de todo el mundo, como yo, para que sepan que tienen un lugar donde ir, gente que les cuidará y un hogar seguro donde vivir si quedan embarazadas y creen que no hay lugar adonde acudir".

El veterano actor católico Martin Sheen también ha expresado repetidamente su oposición al aborto. En una entrevista en 2011, Sheen admitió además que su esposa, Janet, fue concebida por una violación, por lo que, señaló, si su madre la hubiera abortado o tirado en un río, como llegó a pensar, él no la hubiera conocido.

viernes, 8 de febrero de 2013

Cinco mujeres nacidas como producto de una violación dan su testimonio: «No somos un error»

  La polémica la reavivó apenas dos meses atrás el candidato al Senado de los EE UU Richard Mourdock, que en un debate televisivo había afirmado estar en contra del aborto incluso en casos de violación: «Me he dado di cuenta de que la vida es un don de Dios. Creo que incluso cuando la vida comienza en esa situación horrible de violación, es algo que Dios había pensado que sucediese».

Acto seguido, todo el mass media y sus oponentes demócratas iniciaron una campaña de descrédito llegando a sugerir que Mourdock quiso decir que Dios predestina la violación, y aunque el candidato rechazó enérgicamente esta interpretación y aclaró que él simplemente quería decir que Dios crea la vida, la polémica y las habladurías ya habían corrido como la pólvora.

Poco tiempo después, un pequeño grupo de cinco mujeres concebidas como producto de una violación grabó un pequeño vídeo de cinco minutos en apoyo a Mourdock explicando lo agradecidas que están por la elección de no abortar de sus madres. ReL ofrece a sus lectores estos preciosos testimonios.

La historia de Wendy
Wendy, que actualmente reside en Indianápolis, cuenta en el vídeo que su madre biológica fue violentamente violada cuando tenía 19 años y era estudiante universitaria. Aunque decidió no abortar, prefirió dar a Wendy en adopción. Años después, Wendy buscó incansablemente a su madre para conocerla. «Nunca olvidaré la primera vez que mi madre biológica vio a sus nietos, mis cuatro hijos, por primera vez», recuerda Wendy. «Ni tampoco cuando se volvió hacia mí con los ojos llenos de lágrimas y, con toda su emoción me dijo: ´Valió la pena´».

Su madre le contó que el aborto nunca había sido una opción para ella, porque Dios tenía un plan para ella, su nueva hija. «Se lo agradezco, agradezco su coraje y su sacrificio al tenerme y darme la vida». Wendy concluye: «La vida es valiosa, mi vida es valiosa, su vida es valiosa, y su sacrificio también fue valioso».

La historia de Mónica

La madre de Mónica también fue violada con violencia cuando tenía apenas 17 años. «Mi vida tuvo un comienzo muy triste, pero un final feliz también», comienza. En aquellos tiempos, en 1972, en el Estado en el que vivía su madre el aborto era todavía ilegal, así que la vida de Mónica estaba protegida. Cinco años después, la madre de Mónica sufrió un cáncer de útero que le impediría volver a tener más hijos: «Las dos estamos felices de tenernos la una a la otra. Quiero agradecer personalmente a Richard Mourdock el defenderme a mí y a mi vida, y por recordarnos a todos que Dios tiene un plan para cada uno de nosotros».

La historia de Rebecca Kiessling
No es la primera vez que se oye hablar de Rebecca en los medios de comunicación, puesto que una de sus actividades principales es, precisamente, la lucha pro-vida. En el vídeo relata cómo su madre fue secuestrada a punta de cuchillo por un violador en serie, después de lo cual ella quedó embarazada. «Ella en realidad acudió a dos abortistas clandestinos y casi me abortó», dice Kiessling. «De hecho, me habría abortado si hubiera sido legal».

Kiessling agradece sinceramente a los legisladores pro-vida que defendieran su vida en aquel momento. «Debo mi vida a lo que estos legisladores hicieron por mí, porque reconocieron que mi vida debía ser salvada y protegida, incluso siendo un caso de violación. Richard Mourdock es otro de esos héroes. Agradezco que él reconozca que el violador no es mi creador y que yo no soy un producto de una violación, sino hija de Dios», asegura sonriente.

La historia de Sherie
«Yo fui concebida durante una violación. Soy una de esos bebés», comienza su historia. Sherie fue abandonada por su madre biológica y, cuando ya era adulta, volvió a tomar contacto con ella. Fue en ese momento cuando se enteró de su verdadera historia. «Fue muy, muy doloroso», reconoce. «Pero yo supe que Dios Padre era el Creador de mi vida, Él me escogió, Él me ama, y yo no soy un error [...] así que yo personalmente apoyo la causa de Richard Mourdock por la vida», concluye.

La última historia
Después de haberse visto cuatro testimonios, el espectador queda sorprendido al saber que el quinto es... la propia presentadora. «Mi madre tenía 15 años cuando se quedó embarazada tras una violación, y escogió darme en adopción a una fabulosa familia. Aunque mi padre biológico es un violador, yo sigo siendo un ser humano y tengo un valor, y no creo que merezca la pena de muerte por el crímen que cometió mi padre biológico», concluye.

«Creemos que la violación es un acto criminal por el que ninguna mujer tendría que atravesar, y estamos convencidos de que quienes cometen violación o incesto deberían ser penalizados por la Ley, pero también creemos que el niño no debería ser ejecutado por el crimen cometido por su padre biológico. Toda vida tiene valor: la de la mujer que está pasando por esta circunstancia y también la del bebé que pende de un hilo. ¿No podríamos amarlos a los dos?», finaliza el vídeo.

Puede verse el vídeo completo aquí
     





jueves, 7 de febrero de 2013

Los celos patológicos en las relaciones de pareja.

Los celos, sin rayar lo patológico, consisten en un sentimiento o emoción, que casi todos hemos sentido en alguna ocasión, y están causados por el temor a perder a la pareja, ya sea real o imaginado. Pero, ¿qué ocurre cuando este temor interfiere en nuestra dinámica diaria, causándonos angustia, malestar y disputas en la pareja? Veamos lo que son los celos patológicos.

Los celos patológicos o compulsivos

Los celos patológicos son aquellos sentimientos de inseguridad y de temor a perder la pareja, que nos causan emociones fuertes como la angustia, ansiedad, hostilidad, depresión, y que interfieren en nuestro día a día, dificultando la vida normal de la persona y de la relación de pareja.

La diferencia entre los celos normales y los patológicos está en que, en los normales la gente desea que su pareja esté con él y solamente con él, mientras que en los patológicos se va un punto más allá, exigiendo a la pareja que no tenga otro tipo de relaciones amorosas ni sexuales.

Los celosos patológicos desconfían y vigilan constantemente a su pareja, y es probable que en muchas ocasiones muestren esta misma desconfianza sintiendo celos de sus padres, hermanos, amigos… mostrando actitudes de no querer compartir a dichas personas.

Características de un celoso compulsivo

No se puede hacer un retrato robot del celoso patológico o compulsivo, pero sí hay una serie de características que se repiten con cierta frecuencia en este tipo de personas:

1. Tiene escasez de algunas habilidades sociales como puede ser la empatía, hablar en público, asertividad, etc.

2. La desconfianza es un rasgo habitual en su carácter, no solo en el ámbito de las relaciones de pareja, sino en las demás interacciones sociales.
3. Persona controladora y minuciosa, que necesita tener todo bajo su control.

4. Suele “vigilar” o revisar objetos personales de su pareja, en busca de pruebas que corroboren sus sentimientos de celos.
5. Suelen caracterizarse con una baja autoestima, inseguridad y escasa confianza en sí mismo.
Qué hacer ante los celos patológicos o compulsivos

1. Lo primero y más importante es lograr que quien lo padezca, reconozca y comprenda que es un problema, y que le afecta tanto a él, como a su pareja y a terceros que rodean la relación.

2. Toda relación se debe cimentar en el diálogo, en la confianza y en el respeto. Las relaciones que no tienen estos tres buenos pilares, tienen el riesgo de venirse abajo. Luego es imprescindible que la pareja hable, el celoso comunique sus temores, los sentimientos que tiene, las situaciones que lo provocan…

3. Cuando se consigue una buena comunicación en la pareja, pero los celos siguen interfiriendo, es recomendable acudir a un psicólogo especialista en la materia, que haga de mediador y os de las indicaciones oportunas. Un terapeuta de pareja puede ayudar a la persona que sufre de celos patológicos a controlar sus sentimientos y hacerle ver que los celos no se fundamentan en algo real, y que le provocan esos sentimientos que le llevan a realizar conductas contraproducentes para una relación de pareja.

4. En ocasiones, por mucho que las parejas quieran “salvarse” de ese derrumbe, puede ser adecuado un tiempo de ausencia de relación, con el fin de poder evaluar mejor el problema, o bien de reconstruir las vidas por separado.

La Iglesia en la India lanza una original campaña contra el aborto y la violencia a las mujeres

La archidiócesis de Bombay, en la India, lanza una campaña llamada “37 million Diyas”, 37 millones de luces contra los abortos selectivos en razón del sexo y contra la violencia que sufren las mujeres. El número se refiere a la diferencia entre hombres y mujeres que mostraba en el 2011 el último censo de este populoso país.

En todas las parroquias de la archidiócesis seencenderán 37 millones de lámparas y velaspara sensibilizar a la comunidad cristiana ante tantas formas de violencia contra las mujeres: abortos selectivos, homicidios por causa de las dotes, violaciones, mortalidad materna e infantil,violencias en el hogar…

Una agresión cada 7 minutos
La violación, tortura y asesinato de una joven estudiante de 23 años en la India en un autobús a manos de un grupo de seis hombres el 16 de diciembre levantó una ola de indignación por todo el país. A pesar de que se han sucedido las manifestaciones y de que este caso parece haber sido un revulsivo para la sociedad india, desgraciadamente han seguido ocurriendo casos similares.

Y es que las estadísticas muestran que hay una agresión a una mujer cada 7 minutos y se comete una violación cada 54 minutos. Estos casos alcanzan cifras increíbles en un país tan poblado como la India. Por otro lado, en una sociedad tan tradicional, alzar la voz contra cualquier crimen sexual es un tabú. Las víctimas, tienen que tener mucha valentía para denunciar.

En un esfuerzo para ir a la raíz del problema la archidiócesis de Bombay ha lanzado esta iniciativa “37 millon Diyas”. La diya – que es la imagen que se podrá ver en todas las parroquias de Bombay - es una lámpara de barro con aceite que se tenía como luz en las casas más humildes. Según la tradición india, una forma de representar a los amantes es con la imagen de la “diya”, la lámpara, y el “baati”, la mecha de algodón. Para dar luz se necesita a ambos. Van siempre juntos y uno es incompleto sin el otro.

Mujeres etíopes denuncian anticoncepción forzosa en Israel

“Si tu médico te oculta los efectos secundarios del medicamento que te está recetando y no tienes otra forma de averiguarlo, se vulnera tu derecho a poder decidir”, dice Orit Isaschar, portavoz de la Asociación Israelí para los Judíos Etíopes (IAEJ, en sus siglas en inglés). Esta mujer lidera una de las ONG de mujeres que, representadas por la Asociación de Derechos Civiles en Israel (ACRI), envió hace unos días una misiva al Ministerio de Sanidad exigiendo el cese inmediato de la administración de inyecciones de Depo-Provera -un potente anticonceptivo de larga duración- a mujeres de origen etíope que presuntamente desconocían sus efectos secundarios (dolores de cabeza, abundantes sangrados u osteoporosis) y a las que, según IAEJ, no se informó de la existencia de otros métodos anticonceptivos. El extenso uso de Depo-Provera “genera fuertes sospechas de que estamos hablando de una política deliberada para controlar y supervisar la fertilidad en esta comunidad", rezaba la carta enviada al Ministerio.

El escándalo saltó hace unos días cuando una treintena de estas mujeres ofrecieron su testimonio en un programa de la televisión israelí que intentaba dar respuesta al descenso de más de un 20% en la tasa de natalidad de esta comunidad, tal y como denunció un informe elaborado por distintas ONG. “Nos dijeron que la gente que daba a luz muchas veces sufría. Tomábamos la inyección cada tres meses. Nosotras no queríamos”, narraba ante las cámaras una de las etíopes que llegó a Israel hace ocho años.

A la mayoría de estas mujeres, que son acogidas al llegar en los llamados “centros de absorción” durante meses o incluso años según su grado de adaptación, ya se les administraba, de acuerdo a sus testimonios, el anticonceptivo inyectable en los campamentos que la Agencia Judía gestiona en Etiopía, de paso ineludible antes del traslado a Tel Aviv.

En los 80, Israel puso en marcha la polémica “Operación Moisés” con objeto de llevar a su territorio a todos aquellos etíopes -conocidos como ”falashas”, en amárico “entranjero”- que pudieran demostrar ser judíos y que en 1975 fueron reconocidos por el Rabinato como descendientes de las tribus perdidas de Israel. En el país hoy residen más de 100.000.

“Encontramos que el 57% de las mujeres que acudían a las consultas para que se las administrase el Devo-Provera eran etíopes, que una vez en Israel (el 2% de la población es de este origen) continuaron con las inyecciones”, comenta Hevda Eyal, portavoz de la organización Isha L'Isha, responsable del estudio a pie de clínica. “Sospechamos que había motivos étnicos para reducir su número de hijos porque el porcentaje de etíopes es mucho mayor que el resto”, añade Eyal. “Tampoco se estudió cada caso, ni los efectos adversos que podía tener en aquellas mujeres especialmente sensibles a ellos”, señala Orit Isaschar.

El medicamento provoca dolores de cabeza, abundantes sangrados u osteoporosis
Funcionarios del Ministerio de Sanidad y de otras agencias estatales han negado conocer la práctica de inyecciones con Depo-Provera. A la carta enviada por las ONG, exigiendo el cese de los tratamientos y la apertura de una investigación, le siguió una comunicación enviada desde la Dirección General de Salud del Ministerio a las principales clínicas asociadas al sistema israelí de salud, en la que se ordenaba a todos los ginecólogos “no renovar las recetas (de Depo-Provera) para aquellas mujeres que fueran de origen etíope si por cualquier razón se sospechaba que no hubiesen entendido los posibles efectos del tratamiento”.

Algunos medios señalaron esta misiva como un reconocimiento implícito de la práctica por parte de las autoridades israelíes, una acusación desmentida poco después por alguno de sus portavoces. “Es difícil creer que no lo supieran”, dice Orit Isaschar. “Hablamos de años y de miles de mujeres afectadas, ¿cómo uno se cree que esto no lo supiera nadie?”, concluye.

Por su parte, la Agencia Judía, organización estatal que gestiona la emigración de las comunidades judías de la diáspora, siempre ha negado haber gestionado ningún taller de planificación familiar en el campo de Etiopía (Gondar) al que hace mención la investigación y aseguró que antes que ellos, “había estado gestionado por otras agencias”. Los miembros de la comunidad ”falasha” se sienten discriminados por el color de su piel, dado que ninguna otra minoría étnica que ha hecho “Aliá” ha proferido denuncias de este tipo.

domingo, 3 de febrero de 2013

Padres, el éxito no es lo más importante: permitid que vuestros hijos fracasen

Los padres siempre buscan el mayor bienestar posible para sus hijos. Una loable actitud natural, pero que en los últimos tiempos está alcanzando unos niveles excesivos que la convierten en contraproducente, según coinciden en señalar la mayoría de expertos. La denominada sobreprotección parental o infantil (overparenting, según el concepto original en inglés) es cada vez más común y sus efectos a medio plazo pueden ser muy perjudiciales para el desarrollo emocional e intelectual del niño.

Los padres están criando a sus hijos en un “estado de indefensión e impotencia”, lo que les generará dificultades en la vida adulta, pues “carecerán de los recursos emocionales necesarios para hacer frente al fracaso por ellos mismos”, según advierte un grupo de investigadores de la Universidad de Queensland (Australia) en el estudio Can a parent do too much for their child?. La sobreprotección tampoco ayuda a disminuir las tasas de fracaso escolar, más bien al contrario, como relevaron los 128 profesores encuestados para la realización del informe. Otro estudio anterior publicado en la revista New Scientist incluso apuntaba que la sobreprotección no solo inhibe la independencia y la libertad de los menores, sino que incluso puede retardar el crecimiento del cerebro en un área relacionada con las enfermedades mentales.

Una de las equivocaciones más comunes es creer que todo vale con tal de que los hijos obtengan buenas notas, incluyendo el plagio de trabajos, la realización de los deberes del niño y un sinfín de prácticas que se recopilan en el estudio a partir del testimonio de los profesores. En muchas ocasiones, el fracaso (suspender un examen o tener que repetir una tarea hasta hacerla correctamente) puede ser positivo porque el alumno aprenderá de sus propios errores, será cada vez más autosuficiente, ingenioso, competente y ganará en confianza.

Una generación de padres “demasiado blanda”
El mayor peligro de la sobreprotección reside en que socavar la independencia anulará su capacidad de respuesta ante las dificultades que se le presenten. Sin embargo, los especialistas reconocen que es muy complicado para los padres asumir el fracaso de sus hijos sin intervenir para que ello no ocurra. El sentimiento de culpabilidad y de corresponsabilidad se apodera de ellos de forma demasiado fácil, como subrayan los autores, algo que en el pasado no ocurría con tanta frecuencia.
Uno de los educadores participantes en el estudio dice que, tras convivir con un gran número de padres sobreprotectores, lo que más le preocupa es que “los niños han dejado de asumir la responsabilidad de sus actos y las consecuencias naturales de estos”. Asimismo, propone que si realmente quieren beneficiar a sus hijos deberían “mantenerse un poco más al margen, con una actitud colaborativa, pero sin enfocarla a las soluciones directas”. Es decir, ayudar al niño a que reflexione y darle solamente pistas para que él mismo encuentre sus propias respuestas. “Así se beneficiarán tanto el niño, como el padre e, incluso, los profesores”, concluye.
Desde diferentes asociaciones educativas se han elaborado distintas pautas prácticas para evitar la sobreprotección, ante el fuerte incremento de este problema en los últimos años.
- No anticiparse a los errores para evitarlo. Analizar juntos lo que ha ocurrido, qué se ha hecho de forma correcta y qué se puede mejorar.
- Si necesita ayuda averiguar qué es lo que realmente demanda. Quizá lo que pida no coincida con el apoyo que se le iba a ofrecer.
- Permitir que se desenvuelvan solos, aunque tarden en hacer las cosas.
- Darle pequeñas responsabilidades a cumplir sin la necesidad de que, posteriormente, haya un adulto presente (recoger los juguetes, dejar la ropa en el cesto...).
- Favorecer sus relaciones sociales con los iguales para potenciar el desarrollo de su personalidad en otro contexto que no sea el familiar.
- Ante las situaciones de miedo, en lugar de evitarlas, hablarles de lo que va a pasar y transmitirles apoyo. De esta forma su ansiedad disminuirá.
- Protegerles de los peligros reales pero sin llegar al extremo de convertirles en unas personas miedosas.